En la segunda mitad del siglo XIX y en el primer tercio del XX, cuando existieron sindicatos de verdad —esto es, autofinanciados—, a aquellas bandas de sinvergüenzas que cobraban de la patronal o del Estado se les daba nombre ominoso: esquiroles.
miércoles, 16 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario