lunes, 6 de diciembre de 2010

6 de diciembre

El Gobierno quiere prorrogar el estado de alarma hasta dos meses

Adiós Constitución, adiós democracia.

-------------------------------------------------------------------------------

El Ministerio de la Verdad —que en neolengua (La lengua oficial de Oceanía) se le llamaba el Minver— era diferente, hasta un extremo asombroso, de cualquier otro objeto que se presentara a la vista. Era una enorme estructura piramidal de cemento armado blanco y reluciente, que se elevaba, terraza tras terraza, a unos trescientos metros de altura. Desde donde Winston se hallaba, podían leerse, adheridas sobre su blanca fachada en letras de elegante forma, las tres consignas del Partido:

LA GUERRA ES LA PAZ

LA LIBERTAD ES LA ESCLAVITUD

LA IGNORANCIA ES LA FUERZA

Se decía que el Ministerio de la Verdad tenía tres mil habitaciones sobre el nivel del suelo y las correspondientes ramificaciones en el subsuelo. En Londres sólo había otros tres edificios del mismo aspecto y tamaño. Éstos aplastaban de tal manera la arquitectura de los alrededores que desde el techo de las Casas de la Victoria se podían distinguir, a la vez, los cuatro edificios. En ellos estaban instalados los cuatro Ministerios entre los cuales se dividía todo el sistema gubernamental. El Ministerio de la Verdad, que se dedicaba a las noticias, a los espectáculos, la educación y las bellas artes. El Ministerio de la Paz, para los asuntos de guerra. El Ministerio del Amor, encargado de mantener la ley y el orden. Y el Ministerio de la Abundancia, al que correspondían los asuntos económicos. Sus nombres, en neolengua: Miniver, Minipax, Minimor y Minindantia.


(George Orwell. 1984)

La extraña huelga

Gabriel Albiac en ABC

«Rayo que fulmina antes de que el trueno pueda ser escuchado», el Estado debe —según Gabriel Naudé— golpear siempre en el silencio y en la sombra. El rayo fulminó anteayer a los controladores aéreos. Sin que, al parecer, percibiesen ronronear sobre ellos tormenta alguna. Los controladores aéreos son, en España, la cabeza de turco perfecta. Sólo a su terca necedad cabe atribuir la completa ausencia de cálculo de los riesgos que ponerse en tal papel de chivo expiatorio acarrea. Y que cabe en un axioma de Carl Schmitt: el eficaz funcionamiento del poder se asienta sobre la acertada construcción de un enemigo, acerca de cuya definición «decide sólo el Estado como unidad política organizada». Contra la amenaza de ese enemigo, se puede fácilmente soldar a todos aquellos que se reconocen en la normalidad que los enfrenta a aquel que, con indiferencia de sus reales vicios o cualidades, dispara el automatismo de nuestra colectiva alarma, de nuestro recelo o de nuestra antipatía.

---------------------------------------------------------------------------


No puedo estar más de acuerdo. De hecho, yo ya dije algo semejante. Igual que semejante es lo que dice De Prada también hoy en ABC. Y otros. Y cualquiera que tenga dos ojos en la cara y dos dedos de frente.

Estado de alarma

Juan Manuel de Prada en ABC

Rubalcaba sabe que el resentimiento atávico de los españoles precisa, después de ser concienzudamente alimentado, de un muñeco de pimpampum al que se pueda hacer responsable de todas las calamidades que nos afligen. En otras épocas de la historia, los gabachos o los jesuitas desempeñaron a la perfección este papel; y en esta época más bajuna o suburbial de la historia tal papel se asigna a colectivos diversos, desde los obispos a los controladores aéreos. Estos últimos son todavía más eficaces como muñecos de pimpampum que los primeros, puesto que ganan un pastizal (o al menos así lo pregona la propaganda, que también nos martillea las meninges con la consigna de que el pastizal lo ganan por culpa de la derecha), ligan con las azafatas de los aviones (que son la fantasía erótica del españolito medio) y tienen en su mano jodernos el puente de la Inmaculada Constitución, que es el desahogo último que le resta a la gente cuando olfatea que, a la vuelta del puente, se va a quedar sin trabajo. Conque Rubalcaba los obliga a trabajar a punta de pistola (como algunos controladores afirman que ha ocurrido) y el resentimiento social se aplaca: dicen que los duelos con pan son menos; y, a falta de pan, buenas son tortas, sobre todo si las tortas se las llevan, manu militari, esos pijos de los controladores aéreos.

El traje gastado

Ignacio Camacho en ABC

Para celebrar el Día de la Constitución, el Gobierno ha puesto en tensión los límites de las garantías con la cuestionable declaración del estado de alarma ante un conflicto laboral. Es lo que el zapaterismo lleva haciendo casi siete años: forzar la Carta hasta reventarle las costuras y acelerar su desgaste como si fuera un traje estrecho.

(...)

A medio plazo va a ser necesario un pacto de Estado capaz de definir nuevas reglas válidas para otras cuantas décadas, y conviene que las fuerzas hegemónicas piensen en ello cuando aborden sus programas electorales si pretenden alcanzar una cierta altura de miras a la medida de sus responsabilidades.

Entretanto, bastaría con que Zapatero deje de estirar las junturas de la Carta para arreglarse a su antojo a base de reventarle los márgenes; justo en vísperas de la efemérides de hoy ha utilizado el estado de alarma con una ligereza como mínimo discutible. Y por si no fuese suficiente ha solventado la crisis de los controladores con una invención extraconstitucional de facto: la copresidencia del Gobierno.

Viñeta de Montoro en La Razón



El control y el caos

Paco Reyero en La Razón

Borelli, mandamás de «Il Corriere della Sera», llegó a despedir a Indro Montanelli tres veces en un día: una por la mañana, otra por la tarde y la última por la noche. El director gritaba por los pasillos de la redacción: «¿Dónde está esa prostituta de lujo?», que hoy es lo más elogioso que se despacha de un controlador. Pero lo de Borelli, más que un insulto, era la forma de certificar que la dirección claudicaba ante un individuo tan egoísta como «único». «¡Lo mataría si mi supervivencia no dependiera de él!». El teatral golpe de autoridad y alarma de Rubalcaba pretendía mejorar la fe en Zapatero. Decimos fe y no confianza porque el presidente está desaparecido o en proceso de beatificación. El Gobierno podrá echar más de tres veces a los 2.400 controladores. Paradójicamente, para salir del estado de alarma, son imprescindibles porque Blanco no ha previsto quiénes los van a sustituir.

Las reformas imposibles

César Vidal en La Razón

Como en otros períodos de la Historia universal –la Francia de 1789, el Sur norteamericano previo a 1861, la Rusia anterior a la primera guerra mundial…– en la España de 2011, se dan cita importantes grupos de privilegiados que viven a costa del trabajo de la mayoría con la terrible añadidura de que esos mismos privilegiados son los que tienen que llevar a cabo una serie de reformas indispensables que implican el recorte drástico de sus privilegios. Pedirles que realicen esas reformas es tarea tan colosal como la de esperar que el plantador de algodón de Alabama de 1860 emancipara a los esclavos o los aristócratas franceses del finales del s. XVIII toleraran que los burgueses instruidos avanzaran en la escala social. Resulta, por tanto, difícil esperar que lo hagan y que vayan contra las sinecuras y canonjías que durante décadas han ido acumulando, entre otros, rapaces nacionalistas y asesores fantasmales, políticos ignorantes y subvencionados diversos, liberados sindicales y empresarios domesticados. Y, sin embargo, todos ellos, en un gesto de egoísta autoconservación, deberían reflexionar en que si no renuncian siquiera en parte a los privilegios de que disfrutan de manera injusta, si no aceptan disminuir siquiera en parte la carga que soportamos los ciudadanos y si no llevan a cabo en la medida de lo indispensable una serie de reformas irrenunciables, al final, el edificio se acabará colapsando desplomándose también sobre sus propias cabezas.

¡Qué casualidad!

Emilio Campmany en Libertad Digital

Ya ven, el mundo está lleno de casualidades. ¿Qué probabilidad hay de que el fin de semana que el presidente decide no viajar a una cumbre de jefes de Estado y de Gobierno luego se vea obligado a decretar el estado de alarma? Debe ser muy baja. ¿Y qué probabilidad hay de que, a los pocos días de que los empresarios del entorno del Rey pidan un golpe de timón, el presidente no tenga más remedio que, por otros motivos, declarar el estado de alarma? Tampoco debe ser muy alta. Y, sin embargo, qué casualidad, en España se han dado las dos cosas. Y qué casualidad, que la primera vez que ha habido que decretar en España un estado de emergencia, quien lo ha anunciado ha sido Rubalcaba.

(...)

La cuestión es que quienes se postulan para sustituirle, al menos Rubalcaba y Bono –pero debe de haber más– quieren que la dimisión se produzca en el momento que más le convenga a cada cual, por lo que pueden estar interesados en que Zapatero aguante o que dimita según cuando sea. Y, mientras tanto, él tratará de sobrevivir todo cuanto pueda con la amenaza de que, si no le dejan, convoca elecciones y se joroban todos. Pues bien, esa amenaza es un arma que ya no tiene. Y, qué casualidad, por haber decretado el estado de alarma.

Sigan muy atentos a la pantalla que seguirán pasando cosas.

Un tigre de papel

Pedro Fernández Barbadillo en Libertad Digital

Los diplomáticos estadounidenses no conceden ningún crédito a las proclamas marroquíes de que el Frente Polisario y los saharauis puedan ser captados por el huracán islamista y dedicarse a poner bombas. Recientemente, el corresponsal de ABC en Washington consiguió unas declaraciones del coordinador del Departamento de Estado para la lucha contra el terrorismo, Daniel Benjamin, en las que segura que su Gobierno no ha encontrado indicios de que los terroristas de Al Qaeda del Magreb Islámico se estén estableciendo en el territorio del Sáhara Occidental no controlado por Marruecos.

En el cable de agosto de 2008 ya citado, la embajada también había comunicado que esa amenaza a la que recurría Rabat era un espantajo: "no hay ningún indicio de actividad salafista o de Al Qaeda entre la población saharaui".

Merece la pena recordar que, mientras no hay saharauis implicados en atentados islamistas, por el contrario hay marroquíes en casi todo gran acto terrorista de carácter islámico e incluso pequeño, como el asesinato del cineasta holandés Theo van Gogh.

Marruecos es un tigre, pero de papel. De hacer la papiroflexia se encargan sus amigos en España. Y dada la corrupción inmensa que reina en el vecino del sur, suponemos que sus servicios no son gratis.

El País contra la información

Agapito Maestre en Libertad Digital

Yo sólo me creeré algo de todo este montaje de Wikileaks si El País, o cualquier otro periódico juramentado con los directivos de esa agencia al servicio de la humanidad, hace una prelación de esos 250.000 documentos y nos dice cuáles y por qué son los más relevantes. Hay, no obstante, una pregunta clave para un español de bien: ¿existe alguna información relevante en esos documentos de la política exterior de EEUU referente al 11-M? Si no existe nada sobre el particular, entonces paso de investigar sobre la seriedad de Wikileaks.

Besos

Almudena Grandes en El País

Besos, abrazos y otros gestos fraternales pueden bastar para que un líder capaz de presentarse ante los ciudadanos como "uno de los nuestros" alcance el poder. Después, esa seña de identidad, de pertenencia a un grupo, se mantiene como una marca publicitaria mientras su beneficiario desarrolla políticas contrarias a los intereses de sus votantes, sin tomarse ni siquiera el trabajo de justificarlas. ¿Para qué? Luego, en la siguiente campaña electoral, se armarán con sonrisas, besos, abrazos, viejas canciones y la esperanza de que la goma de la fraternidad baste para borrar, una vez más, las huellas de la amargura.

Siempre quedará la Gran Madre Rusia

Alfredo Abián en La Vanguardia

El aumento de la fiscalidad sobre el tabaco fue presentado no sólo con ánimo recaudatorio, sino incluso como una bendición sanitaria para los adictos. Si la droga se encarece, así consumirán menos. Lo dice la propia OMS: por cada diez puntos de presión fiscal sobre los cigarrillos, la inhalación de humo cae hasta un 8%. Teniendo en cuenta que el incremento ha sido del 28%, dentro de poco sólo fumarán quienes aparezcan en las listas de Forbes. (...) Aquí nos protegen, no como en la Gran Madre Rusia. En un ejercicio devastador para los cánones sociosanitarios, el ministro de Finanzas ruso, Alexei Kudrin –la Elena Salgado moscovita–, invita a sus compatriotas a fumar y beber como cosacos porque así pagan más impuestos.

Algo huele a podrido en este conflicto

Luis del Pino en su blog de Libertad Digital

Ante el plante ilegal de los controladores, ¿por qué el Gobierno lleva a cabo su militarización, pudiendo haber incurrido en inconstitucionalidad, tal como denuncia hoy elconfidencial.com, ya que la Constitución establece que la jurisdicción militar sólo puede aplicarse a civiles cuando hay un estado de excepción, que no se ha decretado?

(...)

En estos momentos, en España se ha aprobado, por primera vez en democracia, un decreto de limitación de los derechos de un conjunto de ciudadanos, violentando la correspondiente ley orgánica y sentando un precedente gravísimo de cara al futuro. Se ha aprobado también otro decreto de militarización que contraviene de forma clamorosa la Constitución.

Y lo peor es que ambas cosas se han hecho con el aplauso de una parte de la opinión pública y de muchos medios de comunicación, que han vuelto a abdicar de su deber de servir de contrapeso a los abusos del poder.