Alberto Gómez Corona en Libertad Digital
La respuesta existencial de este socialismo es, cómo no, el Estao. Un Estado que administra un mundo virtual, con amnesia y muerte digna. Para los más primitivos, los Montilla, el régimen ofrece un nacional-socialismo televisivo, con sardana, pantumaca y telebasura gratis, con su supermercado de derechos y creencias en supersticiones e historias inventadas. Para los descastados, el socialismo ofrece un mundo feliz huxleiano de individuos sin relaciones duraderas, con opciones reducidas a la estrecha lista de lo políticamente correcto, bajo amenaza de delito de lesa discriminación, con el juicio crítico sobre el poder en suspensión permanente, donde los idiotas se mueven a sus anchas y la sociedad languidece en la mediocridad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario