miércoles, 3 de marzo de 2010

Bolívar, Zapatero, Chávez

Gabriel Albiac en ABC

Nada demasiado nuevo. Que, en un país riquísimo -los de mi edad recuerdan lo que fue la emigración a Venezuela en los cincuenta- y devastado por la socialdemocracia de Carlos Andrés Pérez -aquel íntimo de Felipe González-, enfangada en el robo y en el asesinato, un caudillo loco tome el poder, es perenne maldición de la América española. Que acabe por arruinar lo poco que quedaba, va en la lógica. Que haga tierra quemada de cualquier libertad, de cualquier democracia, es regla. Pero, ¿por qué un gobierno español y formalmente democrático debe bailarle el agua? ¿Qué hace que un país europeo, garantista, hasta hace pocos años civilizado y próspero, se humille ante una tal quintaesencia de lo peor que ha producido el caudillismo militar hispanoamericano?

¿Qué ETA «militar» ni «militar»?

Antonio Burgos en ABC

Me hierve el agua del radiador cuando trincan en Francia a dos peces gordos de la ETA, a dos capomafias, y la radio y la televisión dicen que ha caído «la cúpula militar de ETA». ¿Qué cúpula ni qué militar? Mire usted, para mí, y más todavía debería ser para TVE y Radio Nacional, la cúpula militar es una cosa donde están el jefe del Estado Mayor de la Defensa, el jefe del Ejército, el almirante de la Flota y el general que manda las gloriosas alas de España. Yo no entiendo otra cosa por «cúpula militar». Cuatro pistoleros asesinos no pueden ser presentados nunca como tal cúpula, y mucho menos como «militares». Yo por militar entiendo lo que el lunes describía perfectamente mi apreciado general Agustín Muñoz-Grandes en su irrefutable Tercera de ABC: unos servidores del Estado que de «las virtudes de la lealtad, disciplina y obediencia» han hecho su abnegada profesión, y que dedican su vida a la España que defienden, a la Patria que honran, a la bandera que juraron.