lunes, 21 de junio de 2010

¡Dichosos futboleros!

Gabriel Albiac en ABC

Hace como un mes, me sorprendió la incipiente presencia en los balcones de banderas españolas. A diferencia de sitios como Estados Unidos, donde lo raro es no encontrarlas a la entrada de cada casa o comercio, la bandera es aquí —por curiosas patologías específicamente hispanas— objeto a mitad de camino entre el desasosiego y la vergüenza. Así somos. Una semana después, las mismas banderas empezaron a ser mercancía privilegiada en los quioscos de mi barrio. Sospeché una mutación histórica. Al cabo, un amigo me fulminó el enigma: «¿Banderas, dices? Pues claro, hombre, el fútbol, el mundial de fútbol. Pero, ¿en qué mundo vives?». No en éste, eso seguro. Pero tenía él razón: nadie que ignore ese noble juego está capacitado para entender una sola palabra de lo que pasa en el país en que vivimos. Probablemente, tampoco en el planeta, porque el fútbol parece haber acabado por ser lo único que queda de la universalidad del bicho humano.

¿Una nueva Solución Final?

Clifford D. May en Libertad Digital

La periodista americana Helen Thomas fue grabada hace unos días diciendo que los israelíes deberían regresarse "a Alemania y a Polonia". Lo chocante aquí no es el antisemitismo de Thomas (bien conocido desde tiempo atrás) sino que ella sólo estaba repitiendo, apenas con un poco más de sutileza, el mismo mensaje a los israelíes radiado desde el buque insignia turco de la flotilla: "Cállense y regrésense a Auschwitz".

(...)

La pintoresca idea de que, habiendo aprendiendo las lecciones del Holocausto la gente civilizada "nunca más" toleraría el genocidio se ha convertido en una broma cruel: basta recordar Camboya, Kurdistán, Ruanda, los Balcanes, Darfur y otros.

Declaración de Bono

Agapito Maestre en Libertad Digital

Bono no podía visitar mejor programa que La Noria. Es su lugar natural. Bono y La Noria forman una "totalidad concreta", diría un marxista de los setenta. Bono en La Noria ya es un icono de la cultura popular española. Es una simbiosis de buen gusto y cultura popular. He ahí la mejor Weltanschauung del socialismo hispánico para el resto del mundo. Toda una concepción del mundo y de la vida. Bono: Pan y Circo. Bono ya es La Noria. Una rueda. Un ritual del caos cotidiano del socialismo transgresor de la nada.

Pensamiento único x3

Carlos Rodríguez Braun en Libertad Digital

Dirá usted: no se puede ser severo con políticos y empresarios, que después de todo no tienen como misión razonar de modo sistemático y solvente. Vale. Pues entonces preste atención a Miren Etxezarreta, que es catedrática emérita de Economía Aplicada de la Universidad Autónoma de Barcelona, y escribió en Público que a partir de 1982 se inició en España una política "neoliberal, uno de cuyos principales componentes lo constituía el rechazo a la participación del Estado en la economía". La participación del Estado en la economía creció espectacularmente desde entonces.

Subir impuestos no es la única política económica posible

Editorial de Libertad Digital

España debe optar por uno de los dos modelos: o la socialdemocracia que sólo nos conduce a más déficit, mayores impuestos, más paro y menores estándares de vida; o las reformas liberales que pasan por reducir el déficit, los impuestos, el desempleo y la pobreza. Pero antes, el PP de Rajoy también debe elegir el suyo: o se decanta por el populismo socialista tan del gusto de Gallardón y otros dirigentes populares manirrotos, o por los planteamientos liberales de Aguirre, Aznar y también en otro momento, es de suponer, del propio Rajoy.

El alcohólico suicida

César Vidal en La Razón

No conozco un solo economista serio que no sea partidario de un recorte drástico del actual sistema autonómico si deseamos salir de la crisis.Incluso no pocos se muestran partidarios de liquidarlo totalmente entre otras razones porque la deuda de las CC AA tan sólo con los proveedores supera la que ha obligado a rescatar a Grecia y porque de todas las CC AA sólo Madrid presenta unas cuentas racionales. Se sea partidario de su reforma o de su desaparición lo cierto es que el actual sistema no puede mantenerse si deseamos no hundirnos cada vez más en la crisis. Pues bien, con ese panorama, los nacionalistas catalanes no pierden ocasión para presionar a las instituciones a fin de que se apruebe un estatuto que, además de ser anticonstitucional, nos aniquilaría económicamente por un siglo.