miércoles, 1 de diciembre de 2010

El último romántico

Laura Campmany en ABC

Admito que el romántico fue un estilo fecundo. Poderoso y creativo. Dio al mundo una cosecha de canciones, preludios y paisajes, pero trajo también morbos confusos, y duelos, y camelias, y una pólvora fina, alimento de oscuros homenajes.

Se esfumó, como un cuervo que saliera volando, y se dejó engullir por el realismo. A ver si aquí en España damos el mismo paso. Si vamos de lo abstracto a lo concreto. Ya nos dijo Machado que el arte importa poco, y navega a merced de la marea, pero en la vida real y cotidiana, la que fluye entre días y trabajos, hay sueños que conducen al abismo.

No hay comentarios: